En general podemos distinguir entre extensiones de pelo natural o extensiones de pelo sintético y cada una tiene unas características distintas a las de la otra.
Las naturales tienen la ventaja de que se pueden peinar, moldear, pasar por la plancha y hacer cualquier cosa que harías con tu propio pelo. Por el contrario las extensiones de pelo sintético no se prestan a nada de esto. Tu decisión debe estar enfocada a si vas a usar las extensiones en un momento concreto o si es para un uso más frecuente.
También conviene saber que las extensiones de pelo natural han podido ser tratadas con productos químicos. Esto hará que la posibilidad de jugar con ellas, como harías con tu propio pelo, sea menor. Si quieres unas extensiones que moldear a tu antojo, lo mejor es usar las de pelo natural sin tratar: llamadas también de “cabello virgen”.
Este tipo de extensiones pueden proporcionarte un look perfecto. Puedes usarlas día a día, jugar con recogidos, complementar la melena que ya tienes, o recuperar el pelo largo que tanto te gusta. El peinado queda a tu elección.
¿Cómo colocar las extensiones largas?
Dependiendo del uso que le vayas a dar, te interesa que sean permanentes o de quita y pon. Si no sabes cuál es el uso que le acabaras dando a las extensiones lo recomendable es que lo tengas planeado para llevar un cuidado adecuado.
Las permanentes van sujetas con queratina caliente o con micro anillos. Es recomendable que sean puestas por profesionales ya que es un proceso de colocación más complejo.
Las de quita y pon pueden ser adhesivas o por clip (o ganchete). Ambos métodos son sencillos de colocar y lo puede hacer cualquier persona en casa. Hazlo con cuidado y tu peinado de cabello largo será perfecto.