Terminadas las fiestas Navideñas, y con las vistas puestas en la operación bikini, muchas mujeres deciden decantarse por las dietas milagro sin saber que efectos negativos puedan tener en su salud. Generalmente, inspiradas por la idea de parecerse a una modelo. Pero en Japón ha aparecido una nueva dieta muy peligrosa, bautizada como “Dieta Cenicienta”.
Un objetivo muy peligroso para la salud
Solo hace unas semanas que este régimen está en la red, pero ya ha despertado las alarmas de las principales autoridades sanitarias. Bajo el hashtag #CinderellaDiet se puede encontrar un reto para todos aquellos que quieran alcanzar un peso muy parecido a la que tiene la popular princesa de la película Disney. Sobretodo esa “cintura de avispa” que presenta el personaje.
No obstante, realizar esta acción supone un gran riesgo para la persona. Para poder determinar el peso que necesitan alcanzar se realiza una ecuación, que les indica el peso a perder. Una dieta peligrosa en la que la masa corporal a alcanzar se encuentra en 18 puntos, cuando el estándar recomendado se encuentra entre 18,5 y 24,9 (dependiendo de la persona). Para obtener la cantidad, se divide el peso por el cuadrado de la estatura en metros.
Aquellos que aceptan el reto tienen que compartir los progresos que están realizando, ya sea a través de fotos y videos. Para los expertos, esto es muy peligroso, pues se anima a la gente a obtener un peso por debajo de los cánones saludables, además de instarles a hacerlo de manera rápida para ser los primeros en alcanzar ese peso “ideal”.
El diario británico Daily Mail ha sido el que ha dado a conocer que este reto ha nacido en Japón. En las redes sociales se está extendiendo como la pólvora, algo que tiene muy preocupados a las diferentes instituciones sanitarias. No es un hecho nuevo, puesto que el personaje protagonizado por Lily James en la adaptación a imagen real de Disney en 2015 ya despertó mucha controversia con esa “cintura tan delgada”, lo que animó a muchas jóvenes a querer alcanzar ese aspecto.
Nutricionistas y expertos en alimentación advierten del riesgo que puede suponer tener una masa corporal inferior a 18. Entre ellos, se encuentra que el sistema inmunológico deje de funcionar, lo que haría a una persona muy vulnerable a enfermedades. Además, también se encuentra el riesgo de sufrir infecciones, un alto riesgo de padecer osteoporosis y problemas de fertilidad.