Para cuidar bien de tus extensiones puedes emplear productos adecuados y con PH apropiado, asimismo usar cepillos cuidando de que no dañen su apariencia. Revisa continuamente las condiciones de tus extensiones. Si no lo haces, y las tratas con el primer producto que encuentres en el mercado, puedes hacer que las extensiones acaben destrozadas sin tan siquiera haberles dado un uso óptimo.
Para el lavado es conveniente el uso de champú y acondicionadores adecuados, además de cremas hidratantes y cremas para peinar con protector solar lo que protegerá las extensiones en todo momento al exponerte al sol.
Cuidados que tienes que seguir:
Cepilla tus extensiones cuidadosamente: Divídelas en tres porciones e inicia el cepillado desde la raíz. Debes lavarlas con suavidad y mucho cuidado empleando champú y acondicionador. Estas por lo general deben secarse al aire libre, puedes auxiliarte de una toalla para retirar el exceso de agua contenido, evitando así dejar humedad.
No utilices productos químicos con alto contenido de alcohol, ni apliques calor directo. Al usar herramientas como secadoras o planchas es fundamental que protejas adecuadamente tus extensiones, esto contribuye a impedir el frizz y el maltrato. Si no proteges adecuadamente el producto, es muy posible que termines por echarlo a perder.
Es recomendable peinar tus extensiones dos veces por día iniciando desde las puntas e ir subiendo hasta llegar a la raíz, para evitar dañarlas una vez estén colocadas.
Al dormir es muy importante realizar una trenza para evitar que se produzcan enredos. Estos enredos pueden no solo afectar a la extensión únicamente, también puede resultarte molesto a ti misma
La calidad con la que estén fabricadas las extensiones influye mucho en la duración y la apariencia, además del correcto cuidado, invirtiendo en tiempo y productos de calidad. Hacerlo así te garantiza tener extensiones hermosas y naturales para complementar tu estilo y realzar tu belleza.