Lo primero que debemos realizar es lavar el cabello a fin de prepararlo para las extensiones. Podéis lavarlo con el champú que más os guste; sin embargo, es aconsejable no utilizar ningún tipo de acondicionador ya que dejaría el pelo demasiado suave y no permitiría que las extensiones se mantuvieran bien sujetas. De la misma manera, debéis huir de los productos que os dejen el pelo aceitoso o graso.
Una vez hayamos lavado el pelo, lo secaremos como solemos hacerlo de costumbre. Después de haberlo secado procederemos a la colocación de las extensiones propiamente dichas. Proceso que detallamos a continuación.
Preparación y colocación de las extensiones
Para comenzar deberemos escoger las extensiones del mismo tono de nuestro cabello o de un tono similar si queremos jugar con los contrastes de color. Una vez tengamos las extensiones, procederemos a cepillar bien el cabello y a dividirlo en partes. De esta forma obtendremos unos resultados excelentes y la colocación de las mismas será mucho más rápida.
Sujetando bien el cabello y comenzando desde la parte de abajo, iremos cogiendo pequeños mechones para ir colocando las extensiones. Enrollaremos los hilos de las extensiones alrededor del mechón, cortaremos el sobrante y repetiremos el proceso hasta colocar tantas extensiones como deseemos. Si no os ha quedado claro cómo funciona este proceso de colocación, os dejaremos un video en el que se muestra la forma de hacerlo correctamente.