La elección del tipo de calzado que usamos a diario no debe hacerse sobre una base meramente estética, es muy importante también considerar la forma en que el calzado protege nuestros pies y si nos ayuda o no a mantener una postura correcta del cuerpo.
Factores de riesgo con zapatos de tacón
Por supuesto las modas y tendencias no siempre tienen en cuenta estos factores, y es por eso que vemos a mujeres vistiendo tacones que elevan los pies sobre los 12 o 16 cm de alto. Las consecuencias para la salud pueden ser fatales, ya que el zapato de tacón fuerza al cuerpo a mantener una posición con las rodillas dobladas y la espalda arqueada, además de agregarle más estrés a la rótula lo que puede derivar a largo plazo en un desgaste del cartílago (osteoartritis).
Este cambio de los puntos de apoyo y del centro de gravedad del cuerpo usualmente provoca problemas en las rodillas, la cadera y la columna. Mientras que los tipos de calzado que comprimen en exceso la punta del pie también pueden causar o agravar otras patologías, como el caso de una fascitis plantar.
Los pies de los hombres también padecen
Los hombres aunque padecen menos problemas de salud derivados del uso de un calzado inapropiado, no están tampoco exentos a sufrir algunos problemas de inflamación en la planta del pie. En este caso se asocia fundamentalmente al uso de zapatillas ajustadas, de las que generalmente llevan una suela muy delgada tipo botín.
Para todos aquellos que desean conocer cuáles son los hábitos que se deben mantener para el uso de un calzado adecuado desde edades tempranas, hemos querido compartir estas claves obtenidas de acuerdo a un estudio realizado por la Universidad Complutense de Madrid. ¡Léelas atentamente!
Claves para elegir el calzado apropiado
- Se recomienda elegir un calzado confeccionado de materiales naturales para permitir la transpiración del pie, ya que el sudor acumulado puede favorecer el crecimiento de bacterias tanto en el pie como en el calzado.
- El calzado debe ajustarse perfectamente al pie, considerando su anchura y longitud de manera que no existan compresiones.
- Botines sin mucha altura y con poco tacón. El calzado estrella del invierno son los botines, pero es importante conocer el tipo de botín más apropiado para nuestra salud. Los botines planos son los ideales para nuestro cuerpo, ya que los pequeños tacones de 3-4 centímetros que llevan son la altura ideal para conseguir una postura correcta.
- El corte la parte superior del calzado debe ser hecho de pieles suaves y flexibles, para permitir el movimiento natural del pie.
- Las punteras no deben ser demasiado estrechas, ya que esto afecta la movilidad de los dedos en el interior del calzado durante una caminata regular y en sus diferentes etapas.
- Se recomienda elegir un calzado que posea refuerzos en la zona del talón, ya que estos diseños brindan más estabilidad al pie.
- La suela debe ser flexible pero no deformable, así como tampoco se recomienda ni muy fina ni demasiado gruesa. Debe presentar un despegue de puntera para evitar tropiezos. En cuanto a los materiales las suelas de cuero favorecen una buena transpiración del pie, mientras que las de caucho se recomiendan por su adherencia firme, la capacidad de absorción del impacto y la durabilidad.
- No se deben usar de forma regular los tacones altos ya que estos aumentan la compresión de las articulaciones del empeine y los dedos de pie, debido al deslizamiento de los dedos hacia la punta. También favorecen la aparición de deformidades y lesiones dérmicas a nivel digital, como podemos leer en este artículo.
- Se recomienda optar por un calzado de tacón grueso con una base ancha, que no sea demasiado bajo ni demasiado alto, ya que ambos extremos pueden causar patologías en el pie. La altura que se recomienda en los zapatos de tacón para mujeres oscila entre 2 y 4 cm, mientras que para el hombre debe ser entre 2 y 3 cm.