Como te mencionamos, no todos los recogidos de fiesta deben de ser complicados. Existen diversos estilos que pueden ser de fácil elaboración, pero que mantienen el look elegante e impactante que buscas. Por ejemplo, a continuación te mostramos un listado de recogidos de fiesta última tendencia para que experimentes:
1.-Toma un mechón de cabello del lado derecho tomando como referencia la raya del medio de tu cabello, y enróllalo hacia atrás en un bucle grueso. Reserva también un mechón del lado izquierdo.
2.-Usa dos ganchos negros (horquillas) para sujetar con firmeza en la parte posterior de tu cabeza el mechón que has enrollado en sentido contrario. Habrás formado en este punto una especie de corona.
3.-Divide el cabello que cae encima de tus hombros en dos mitades iguales. Amarra ambas divisiones en una coleta sencilla.
4.- Enrosca ambas coletas hasta formar una cebolla pequeña con nudos y destina unas cuantas horquillas para mantenerla en su sitio. Empieza atando las puntas con una horquilla plana y finaliza con los bordes.
5.-Cuando hayas terminado de adherir perfectamente la primera coleta en una cebolla con nudos, continúa con la otra e intenta que adopte la misma forma.
6.-Con el cabello sobrante, la corona de los laterales y el mechón reservado, haremos dos trenzas de espiga cruzando extremos o mechones entre sí. Sellamos las trenzas con una goma.
7.-Para terminar, fijamos con horquillas ambas trenzas justo encima del moño; haz un doblez si tu melena es larga.
Consejos para realizar este recogido de fiesta
Realiza este peinado con el cabello limpio y acondicionado; rocía un poco de fijador en los mechones que enmarcan el rostro si fuera necesario para que no queden cabellos sueltos. Si tu cabello es abundante, divide cada coleta en dos secciones para facilitar el montaje de los rollos.
El resultado es un recogido sutil, formal y cautivador. Por su facilidad es un estilo el cual no necesariamente necesita un profesional para ser elaborado. La idea de este tipo de recogido es que sea funcional para ti, sin menospreciar el factor de elegancia que al final es el objetivo del peinado. ¡Atrévete a hacerlo en casa!